Hace un año traje de la ciudad de los caballeros a un Halcón Nocturno. No volaba, y su fortaleza estaba venida a menos.
Pero yo supe animarlo. En caracas aprendió nuevamente a volar. Pero su suerte lo llevo meses después a descansar un año.
Hoy voló otra vez. Y esta noche hace nido en hoyo de la puerta.
¡Vuela nuevamente Nighthawk!. Y Sirve a tu nuevo amo.
Sinceramente.
Abel